2×1 = 30000 razones para llenar las calles

Cuando me enteré de que la aplicación del 2×1 podría corresponder también a los genocidas… cataratas de pensamientos acudieron a mi cabeza, recuerdos, sentimientos, discusiones, sensaciones, algunos hechos concretos y el recuerdo de mi caso particular del proceso de toma de conciencia sobre el tema.

Luego de haber vivido casi como dentro de un “tupperware” durante los ´70 y la dictadura, y prácticamente sobre la llegada de la democracia, fui tomando conciencia de todo el horror que había sucedido. Ese conocimiento y esa toma de conciencia se fue dando en pequeñas etapas, en la medida que se iba avanzando en las causas de los derechos humanos. Estimo que no fui el único al que le sucedió…

Luego del descubrimiento de los primeros horrores, me viene a la mente el enterarme que todo ese proceso no había comenzado el 24 de marzo del 76, sino que la AAA con José López Rega a la cabeza ya venía operando. Las manipulaciones hechas durante el mundial del 78 dirigiendo a la muchedumbre de manera tal de amenguar las manifestaciones que se hacían en defensa de los derechos humanos y el reclamo por los desaparecidos. Los eslogan “los argentinos son derechos y humanos” y “el silencio es salud”. La conformación de la CONADEP y el juicio a las Juntas por decretos de Don Raúl Ricardo Alfonsín, y a partir de allí todo me sigue apareciendo desordenadamente… e irrefrenablemente.

La vez que leí por primera vez la carta de Rodolfo Walsh.

Cuando me surgió una admiración profunda, muy profunda, por Las Madres. De muchas maneras las sentí mi madre, nuestras madres, las madres de todos.

La identificación de la gran cantidad de centros de detención, los diferentes tormentos a que sometían a las víctimas y que morbosamente se iban descubriendo ante los ojos del mundo. La comprensión de qué es un delito de lesa humanidad. La discusión acerca de la importancia de entender y deconstruir la teoría de los dos demonios. Comprender qué era el terrorismo de Estado. La constitución de un nuevo delito: “la apropiación de menores”. La complicidad de la cúpula de la Iglesia. La complicidad civil y los roles de empresarios como los de la Mercedes, y la Ford o los Blaquier del ingenio Ledesma. La apropiación de inmuebles y el caso de Papel Prensa, etc.

Los juicios, las idas y vueltas, las leyes de punto final y obediencia debida y los indultos…

El perdón histórico que pronunció Néstor. El simbólico e inolvidable hecho de bajar los famosos cuadros de Videla y Bignone de las paredes del Colegio Militar de la Nación. La tarea de Nilda Garré al frente del Ministerio de Defensa, cambiando, entre otras cosas, los planes de estudios de los cuadros militares. La idea de ser, La Argentina, un ejemplo para el mundo en estos temas, en contraposición con España por ejemplo donde impera el “de esto no se habla”. La continuidad de esa política con Cristina.

La cárcel para los genocidas. La muerte de Videla en la cárcel.

Entre horrores, recuerdos, acontecimientos y cuestiones legales, uno que me martilla en la cabeza es la comprensión de que estamos hablando de delitos que se siguen cometiendo al día de hoy. Mientras no se tengan sus cuerpos, su paradero o el lugar de sepultura, mientras haya un sólo niño (hoy adulto) apropiado que no pueda gozar de su verdadera identidad, de su verdadera familia, de su verdadera historia, el delito se sigue cometiendo. Estás leyendo esto y el delito se sigue cometiendo, Liberarán a estos genocidas y el delito se seguirá cometiendo.

Ese motivo, sumado a los horrores y más allá de lo que los juristas puedan argumentar, es suficiente para que el 2×1 sea inaceptable por nuestra sociedad.

Vayamos a la Plaza de Mayo el próximo miércoles 10 de mayo a las 18 a manifestarnos hasta lograr REVERTIR este fallo de La Corte para cumplir con la exigencia de Memoria Verdad y Justicia, para avanzar en los juicios a los participantes civiles y de la Iglesia en esa dictadura que no debemos olvidar. Si lo olvidamos…. si no se hace Justicia… se repetirá.